HISTORIA DEL HILADO

El arte de hilar las fibras para formar un hilo es tan antiguo que sobrepasa las fechas históricas. La hilatura en si no responde al descubrimiento o invención de algún hombre o época, sino mas bien es una acumulación de conocimientos y pequeños avances tecnológicos por parte de millones de hombres, a través de miles de años de esfuerzos con el fin de encontrar la mejor forma de satisfacer las necesidades diarias.

El hombre primitivo, en la edad de piedra, utilizo las fibras naturales para convertirlas en telas. Es probable que primero aprendiera a tejer antes de haber aprendido a hilar entretejiendo gruesas fibras de hierbas. Más tarde aprendió a hilar las fibras para confeccionar prendas de vestir y, mucho más tarde, comenzó a tejer  el vellón de sus animales para transformarlos en paños de lana. La elaboración del hilo con ayuda  del huso manual fue común en la gran mayoría de las culturas primitivas, perdurando hasta nuestros días como la primera técnica de hilado.

En cuanto a la rueca, esta constituyó la primera asistencia mecánica par el hilado a mano, siendo utilizada por primera vez en India, durante la Edad Media, siendo introducida posteriormente en Europa, donde fue perfeccionada. El proceso de hilatura sigue en evolución, y sus adelantos se dirigen a reducir las etapas que intervienen en su combinación de operaciones.